La fotografía contemporánea es el medio perfecto para desencadenar esta reconstrucción por muchas razones. Por la gran fascinación que ejerce sobre el público y por la inquietud en la que se encuentra. Mientras hablamos, ya ha cambiado, cambia continuamente. Y quienes la redefinen no son los fotógrafos, la academia, los editores. Son más bien el mercado, la tecnología y los usuarios, el propio público. Y así, mientras intentamos contener, preservar y salvaguardar la fotografía, su nombre ha cambiado una vez más, ya. De modo que los que deberían ser los protagonistas de esta redefinición optan por no hacerlo, creyendo en el autoengaño de que son ellos los que gobiernan los cambios.

Nos gustaría ser un pequeño y nuevo espacio donde este diálogo pueda refugiarse. Creemos que intentar redefinir las fronteras de este universo en rápida transformación, donde la vanguardia y la ficción se mezclan con la realidad, donde todo se rompe para volver a reunirse, puede ofrecer una comprensión más profunda.

Este es el punto de partida, evitando todo dogma, y confiando en la infidelidad del mar. PhEST ha confiado la dirección artística a Giovanni Troilo y el comisariado de fotografía a Arianna Rinaldo.